20 Octubre 2010
 
Fuimos a Nueva Santa Catarina para la clínica mensual.  Daniel vio 74 pacientes.  Entre los cuales llegaron dos mujeres con casos trágicos a simple vista.

Estas dos mujeres están embarazadas.  Al preguntarle a una de ellas cuántos embarazos había tenido, me contesto que dos y que este era el tercero; pero los dos bebés que había tenido antes habían muerto al nacer. Así que le pregunte qué es lo que había pasado, me contesto que los dos estaban en mal posición.  Es decir que al nacer sus pies salieron primero y cuando salieron de su vientre ya no respiraban.

Su hermana que hablaba más español me dijo, la comadrona (partera) le dijo que el bebé estaba en buena posición, pero con el otro bebé le habían dicho a la madre que el bebé estaba sentado pero ella no quiso ir al Hospital.  Al hacer el ultrasonido de su tercer bebé vimos que estaba parado, aun le faltan dos meses para dar a luz. Así que esperamos que regrese una vez más para checar su posición.  Finalmente le dije a la señora que no se preocupara y que primeramente Dios va a tener a su bebé bien; su hermana me dijo que su familia ha estado orando por su embarazo.  Además le mencione que si fuera necesaria una cesárea, era mucho mejor realizarla y tener dolor por un tiempo a que pase algo peor con ella o su bebé.

Después de ella vimos a otra mujer casi con la mima situación.  Ella está en su segundo embarazo. Pero tristemente su primer bebé murió.  Me menciono que la comadrona le había dicho que su bebé estaba bien, después fue a hacerse un ultrasonido a los ocho meses y le volvieron a decir que su bebé estaba en buena posición. Pero el día que estaba dando a luz en su casa, el bebé nació con los pies primero, y su cabeza se quedo atorada, ella dijo que por cinco o seis minutos. La comadrona no podía hacer nada así que llego la doctora del Centro de Salud a ayudarla. La doctora saco la cabeza del bebé y lo llevaron al Hospital en donde estuvo internado por cinco días y murió.

No me gustaría culpar a nadie en cada uno de los dos casos ya que Dios tiene el control de todas las cosas, y aunque estos casos son lamentables en la carne; lo mejor en medio de estas historias es espiritualmente,  porque tres pequeños tienen vida eterna en Cristo.  Es hermoso saber que en este momento están gozando de la eternidad con nuestro amado Salvador y algo mejor que ello, nunca podrá existir.

“no mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas.”  2 Corintios 4:18